Como padres siempre queremos el bienestar para nuestros hijos. Por eso, al levantarnos podemos pedirle a Dios, que les permita a nuestros hijos disfrutar de un día maravilloso satisfecho de su misericordia y de sus bendiciones.Señor, actualmente en este hermoso día que comienza, quiero entregarte un clamor que nace de los espacios más recondito